Secciones
Servicios
Destacamos
Edición
IÑAKI ESTEBAN
Martes, 18 de septiembre 2007, 14:35
Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.
Compartir
Partió «de la nada, sin cultura, sin fortuna», como él mismo reconocía. Pero estaba dotado de un ojo especial, de una mirada incisiva que en instantes desvelaba la calidad de los cuadros. Gracias a ella trabajó en la galería Beyeler de Basilea (Suiza) y se ...
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.