La red privada amarra un compromiso con Educación para la financiación total

Las ikastolas de Partaide y los colegios concertados han logrado arrancar del Gobierno vasco un compromiso de financiación total de la red en el final de la legislatura. Los centros de titularidad privada han firmado con el Departamento de Educación un acuerdo por el que la consejería adquiere la obligación de incrementar las subvenciones de la Administración para ajustarlas al servicio educativo que cumple esa red -reclaman un incremento de 150 millones de euros, sobre los cerca de 550 que reciben en la actualidad-. «El acuerdo es un paso en la buena dirección», señalaron ayer las patronales del sector, que adelantaron que el próximo Ejecutivo deberá asumir ese pacto.

En contrapartida, los colegios concertados se comprometen a someterse a una evaluación del uso de los fondos públicos en relación con los objetivos educativos marcados por el Departamento: la atención a la inmigración y las necesidades especiales, la euskaldunización o la calidad educativa, entre otros. Las patronales de la red concertada -las mayoritarias son Partaide, de las ikastolas, y Kristau Eskola, de colegios religiosos-, «realizarán una gestión transparente de la financiación pública recibida», señala el texto, y se someterán a inspecciones.

El pacto alcanzado permite una primera inyección económica para este ejercicio de algo más de 14 millones de euros con el fin de financiar las figuras de tutor, orientador y consultor, pero marca para el futuro «incrementos en las dotaciones anuales». El convenio detalla las peticiones de las red concertada en cuanto a proporción profesor-alumno o la inclusión de nuevas figuras -lo que obliga a aumentar plantillas-, los pluses por director o jefe de estudios o las partidas para mantener los centros. Compromete al departamento a hacer frente a esos gastos «a partir de 2010». El convenio tiene carácter transitorio hasta que se apruebe la Ley del Sistema Educativo, en la que se contemplará la financiación completa.

Escenificación

Los representantes de la red concertada llevan más de un año de negociaciones con la consejería y temían que acabara la legislatura sin lograr resultado alguno. Los responsables de ikastolas y colegios quisieron ayer presentar el pacto con el área que dirige Tontxu Campos para dejar constancia del compromiso del Ejecutivo. «El acuerdo deberá tener necesariamente continuidad, a pesar de que nos encontramos al final de la legislatura», advirtieron.

Argumentan que los colegios concertados cumplen una labor educativa y social igual que los públicos, por lo que tienen derecho a ser financiada al 100%. En estos momentos, el dinero que reciben del departamento les llega para afrontar el 80% de los gastos, el resto se compensa con las aportaciones de las familias y una mayor dedicación horaria del profesorado. La consejería admite en el texto del convenio que resultaba «inaplazable» incrementar las subvenciones a esa red. De cada 4 euros que dedica el Gobierno vasco a Educación sólo 1 se destina a los centros subvencionados, que acogen al 51% de los alumnos de la comunidad. Al Ejecutivo le cuesta cerca de 3.000 euros pagar la factura de un escolar en un aula concertada, menos de la mitad que en la pública.

Los responsables del sindicato STEE-EILAS, mayoritario en Kristau Eskola, reiteraron ayer que mantienen la huelga de profesores para los días 11 y 12 de febrero por mejorar sus condiciones laborales, ya que «desconfían» de la «legitimidad» del convenio alcanzado.