La osadía digital de los mayores

Los mayores aceleran su incorporación al mundo de las nuevas tecnologías en un denodado esfuerzo por evitar su «exclusión digital» dentro de una sociedad que vuela en ese ámbito a mil por hora. Y en Sajazarra lo hacen, además, con buena nota y exhibiendo un nivel de creatividad reconocido públicamente por Fundetec, fundación sin ánimo de lucro cuyo principal objetivo es «contribuir al fomento de la sociedad de la información en España mediante el desarrollo de iniciativas que favorezcan el acceso de ciudadanos, empresas e instituciones a las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC)».

Una de ellas, el concurso nacional que respaldaba el Plan Avanza del Ministerio de Industria y con el que se pretendía impulsar el acceso de los mayores a Internet para superar la barrera de la edad -uno de los principales inhibidores a los que se enfrentan-, acabó premiando el proyecto desarrollado por las usuarias de la ciberteca del municipio riojalteño: un calendario que muestra algunas de las actividades que se realizan en la población.

Sobre el papel, un esquema de trabajo ciertamente sencillo. Sobre el ordenador, durante meses la herramienta utilizada por este grupo de mujeres, un programa de trabajo apasionante ya que con él, destacaron los responsables de la propuesta, acabaron aprendiendo a utilizar las herramientas de fotografía digital retocando las imágenes que ellas realizaron para presentar un producto ciertamente 'acabado', impecable.

Proyecto más votado

Tanto que en el caso del proyecto riojano concurre una circunstancia que le concede doble valor. La organización decidió otorgarle reconocimiento público durante la entrega de premios llevada a cabo en Madrid porque fue el más votado por los visitantes del portal digital del concurso 'mayoresconiniciativa'.

El resultado del trabajo realizado, entre otras por la coordinadora del programa, Consolación Mayor, no sólo obtuvo el reconocimiento de los numerosos vecinos que esperan la publicación del calendario, ahora colgado en la red y en el que se reproducen algunos de los rincones más singulares de la villa, sino del jurado popular de un concurso «acorde con los objetivos de Fundetec que pretende sensibilizar sobre el uso de nuevas tecnologías a colectivos sensibles y en situación de riesgo de exclusión social y digital», apunta la gerente de los proyectos de la fundación, Lourdes Iglesias.

Con él, explicó, se pretendía demostrar que «los mayores tienen mucho que decir y que la edad no constituye ninguna barrera para poder participar de forma activa en una iniciativa que les otorgaba la posibilidad de descubrir Internet» utilizando de gancho para ello «sus propias aficiones e intereses» que han acabado siendo puestos en valor induciéndoles, para ello, a utilizar el ordenador.

Resultado prometedor

El resultado final, sostiene la máxima responsable de este programa, es «prometedor porque los mayores demuestran estar animados a seguir investigando en este campo, desarrollando asimismo trabajos que les permiten compartir y enganchar».

Pero sobre todo porque el nivel de participación demuestra que han superado «su rechazo inicial» y se han convertido «en los mayores consumidores de Internet, fundamentalmente porque son el colectivo que más tiempo libre tiene».

Ése era, a fin de cuentas, uno de los objetivos que se perseguían en Sajazarra.