Sendero Luminoso irrumpe con una bomba en las elecciones presidenciales de Perú

Varias personas han resultados heridas tras la explosión de un artefacto explosivo colocado por la guerrilla Sendero Luminoso (SL) en la localidad de Llata, en el departamento de Huánuco, según el Consejo por la Paz. La información sobre la colocación de la bomba fue confirmada por Ángela Silva, observadora de dicha organización en Llata, donde se encuentran asimismo supervisores electorales a nivel nacional, especialmente en las zonas de emergencia, de narcotráfico y terrorismo. Al respecto, el Consejo por la Paz ya advirtió a la opinión pública y a las autoridades peruanas hace varias semanas de la presencia de una columna senderista pidiendo documentos, borrando propaganda y amenazando a la población para que no participase en las elecciones.

De hecho, el terror se apoderó ayer de cientos de personas que se dirigían a distintas localidades de Huánuco, después de que varios autobuses interprovinciales fueran interceptados por columnas de Sendero Luminoso. Los viajeros, tras ser obligados a bajar de las unidades, fueron amenazados para que no emitan su voto en las elecciones generales de hoy. Incluso algunos pasajeros aseguraron haber recibido amenazas de muerte si los encuentran con tinta indeleble en el dedo anular.

Los peruanos eligen al presidente y a sus representantes

Los peruanos acuden hoy a las urnas para elegir al presidente y al Congreso en los comicios más disputados de su historia reciente, dado el estrecho margen que otorgan los sondeos a los tres principales candidatos. Los favoritos para llegar a la Presidencia son el ex militar Ollanta Humala, la conservadora Lourdes Flores y el ex presidente Alan García (1985-1990), quienes confiaron durante la última jornada de reflexión a que los indecisos, que ascienden al 10% del electorado, se unan a sus propuestas. De acuerdo a un simulacro de voto realizado por la empresa Apoyo, cuya difusión en Perú está prohibida por Ley, Humala es el favorito con el 27% del respaldo popular a pocas horas de las elecciones, seguido por Flores y García, que con el 23% están empatados.

El estudio de Apoyo indica, además, que el Partido Aprista Peruano (PAP), de García, puede hacerse con la mayoría simple en el Congreso de 120 escaños, al conseguir unos 38 asientos, seguido por Unión por el Perú, de Humala, con 29; y Unidad Nacional, de Flores, con 24. Con estos datos, los analistas alertan del "incierto" panorama y coinciden en que el presidente será designado en una segunda vuelta, dado que ningún candidato logrará la mayoría absoluta, aunque no se atreven a determinar quiénes estarán en ella.

En su último mensaje a la nación antes de las votaciones, el presidente peruano, Alejandro Toledo, apeló a votar "constructivamente" por la continuidad y abogó a elegir como mandatario a la persona a quien confiarían su casa. Pidió a los peruanos que se aseguren de que "lo poco o mucho" que su gobierno ha construido "no se pierda" e instó a que "la libertad de expresión, los derechos humanos, la independencia de los poderes y las políticas sociales no se trunquen". "No dejen pasar por la puerta falsa a los flagelos del terror, del autoritarismo; que la impunidad no pase", recalcó el mandatario, en una velada referencia al favorito en los sondeos para las presidenciales, el ex comandante Ollanta Humala.

Humala, el defensor de los más desfavorecidos

Varios agentes de la Policia Nacional Antimotines han tenido que trasladarse hasta el colegio electoral en la Universidad Ricardo Palma de Lima para proteger la salida del candidato presidencial de Unión por el Perú, Ollanta Humala, en medio de gritos en su contra y la rotura de algunos cristales. Humala había llegado a primera hora de la mañana al centro de votación acompañado de su esposa, Nadine Heredia, y tardó unos 20 minutos en llegar a la urna donde tenía que depositar su voto, en medio de un gran caos, golpes y contusiones de varios periodistas, según informa la prensa local. El candidato ha calificado este incidente de "acto fascista" que a su juicio "ha enturbiado el proceso electoral".

Durante la campaña electoral, Humala se ha erigido como el defensor de los más desfavorecidos con un discurso nacionalista y ha sido objetivo de los mayores ataques por parte de sus adversarios y también de los medios de comunicación. La campaña, que concluyó el jueves con los últimos mítines de los principales candidatos, se ha caracterizado por una "guerra sucia" en la que no han faltado denuncias y avisos publicitarios con graves acusaciones. El clímax surgió con la difusión por internet de un vídeo-juego, llamado Ollanta Recargado, en el que el ex militar ataca con balas y granadas, junto al presidente venezolano Hugo Chávez, a políticos, periodistas y ciudadanos peruanos. En la segunda y última jornada de reflexión, Humala se reunió en privado con los observadores internacionales, que superan el centenar, quienes mostraron su confianza en que los comicios serán transparentes.

Los supervisores, que pidieron cautela a la hora de difundir los sondeos a pie de urna posteriores al cierre de los colegios, pertenecen en su mayoría a la Organización de Estados Americanos (OEA), además de la Unión Europea y otros países, como España. Unos 94.000 policías y 70.000 militares velarán por la seguridad de estos comicios, especialmente en las zonas declaradas en emergencia del interior del país donde operan remanentes de Sendero Luminoso y grupos de narcotraficantes. Veinte candidatos se disputan la Presidencia y más de 2.500 aspiran a entrar en el Congreso, constituido por 120 escaños, cifras récord en la historia de Perú. Los 16,4 millones de peruanos convocados a las urnas también elegirán, por primera vez, a los diez titulares y cinco suplentes del Parlamento Andino, formado por este país junto a Bolivia, Colombia, Ecuador y Venezuela.